El Parque Natural de Los Islotes y Riscos de Famara añade a su interés geomorfológico su condición de ser uno de los mejores en claves biogenéticos de Canarias.
La abrupta topografía del Risco de Famara, su altitud y orientación que lo exponen a las capas bajas del alisio, han creado unas condiciones climáticas que unidas al aislamiento originaron una vegetación extraordinariamente singular y constituye uno de los reductos de flora endémica más importantes de Canarias. Aquí se localizan 10 especies endémicas de Macaronesia y 24 endémicas de Canarias de las que 12 son exclusivas de los Riscos de Famara. La avifauna más significativa del Risco está formada por el guincho, halcón de Eleonor y halcón de Berbería.
La riqueza natural de los islotes está determinada por la combinación de una serie de factores: el tamaño, la variedad de hábitats que presentan, su aislamiento y la riqueza en recursos del entorno marino que los circunda. Esto hace que puedan acoger colonias de cría de aves marinas como la pardela chica, el paiño común, pardela cenicienta, paiño pechialbo y gaviota argentéa. Entre las rapaces destacan las poblaciones de águila pescadora o guincho y el halcón de Eleonor del que esta zona constituye el área de cría más meridional de la especie.
Con respecto a la flora de los islotes, dominan los matorrales xerófilo-halófllos, con abundancia de salsolas, tabaibas y submatorrales sammófilos asociados a las zonas arenosas. Como endemismo propio destaca la presencia de la tedera de Alegranza, refugiada en pequeñas fisuras inaccesibles.