Nació en Guatiza a finales del siglo XIX, desde muy joven se dedicó a la poesía. De espíritu bohemio, buscó fuera de Lanzarote otros horizontes. Se trasladó a la isla de Cuba, isla en la que murió a mediados del siglo XX. De su poesía titulada Un día de locura o Locura de un maniquí, escrita en Guatiza el 7 de septiembre de 1903, escogemos los siguientes versos:
De septiembre una mañana
Perfumada y sonriente …
Fue cuando tosco e imprudente
Emprendí mi excursión vana.
El sol alegre asomaba
Por los balcones de Oriente
Y su rubia luz dorada
Mi rostro de adolescente.