Fuente: Lanzarote. Apuntes para su historia
Por José Manuel Clar
En 1767, las fortalezas de Lanzarote fueron reconocidas por el ingeniero don Alejandro de los Ángeles, quien levantó de nuevo los planos sobre las mismas. En el informe que emitió tras su misión, en fecha 16 de julio de 1767, menciona el estado y consistencia en que se hallan las fortificaciones que defienden los puertos, playas y desembarcaderos de las siete Islas Canarias, con expresión de la existencia de su artillería, armas, pólvora, municiones y pertrechos.
Refiriéndose a las de Lanzarote, y más concretamente, al castillo de Santa Bárbara, dice lo siguiente: «Dicha isla es de Señorío y sus moradores contribuyen con los mismos quintos como los de Fuerteventura para fortificaciones. Tiene un castillo pequeño, de mediana defensa a dos leguas dis¬tante del mar y de un cuarto de legua de la Villa de Lanzarote, situado en una eminencia ventajosa. Necesita de bastantes reparos. Tiene cinco cañones de bronce de pequeños calibres y con¬viene colocarle dos más de a 16 ó de a 12. Tiene también 43 fusiles de buen servicio y necesita renovar todas las cureñas de su artillería y demás pertrechos, balas y municiones correspondientes».